Dólar estable e inflación del 5.10 por ciento permitirán que los costos de los materiales para la construcción se mantengan en un nivel medio. Cuestión que permitirá el crecimiento para el sector. En 2022, el Banco Inmobiliario Mexicano cerró el año con más de 11,200 millones de pesos. Un número muy por encima del que se presentó en 2021
Se ha llegado a la primera quincena de este 2023; y con base en esto, las primeras perspectivas para el sector inmobiliario en México. Es bien sabido que el año pasado éste tuvo un dinamismo importante, es necesario contemplar distintas variantes para estimar el comportamiento durante los próximos meses.
De acuerdo con Gregorio Sánchez, director corporativo y de negocios del Banco Inmobiliario Mexicano (BIM), en la Encuesta de los Especialistas Económicos del Banco de México (Banxico) se pronostica que para este 2023 haya una inflación del 5.10 por ciento, un tipo de cambio de 20.8 pesos por dólar y una TIIE de 10.25 por ciento.
“Considerando estas cifras podremos suponer que los costos de los materiales para la construcción no seguirán con su tendencia alcista. El tipo de cambio permanecerá estable y la tasa de interés se mantendrá alta, lo que conllevará a que permanezca una restricción en los créditos por su alto costo financiero”, agregó Gregorio Sánchez del BIM.
Adicional a este primer análisis, el especialista del Banco asegura que el sector inmobiliario se recuperará y se estabilizará gradualmente durante los próximos trimestres, esto ante un escenario que por mucho tiempo estuvo frenado en términos generales y que la pandemia vino a impactar con mayor fuerza.
“Esto dependerá en mayor medida de la manera en la que se controle la inflación, ya que ésta afecta directamente al poder adquisitivo de los compradores, quienes podrían posponer su intención de compra. Del mismo modo afecta el costo de la construcción de la vivienda, tanto en el costo de sus materiales como en la mano de obra”, agregó Sánchez del BIM.
Sin embargo, esto se puede agudizar y poner al sector en jaque, pero esto sería si se presenta una recesión, misma que es latente, pero evitable “debido al aumento de la inflación hay una probabilidad de inflación que encarecerá la producción de vivienda y disminuya los ingresos de los compradores, lo anterior se traduciría en una menor demanda que haría disminuir los precios de la vivienda, pero esta disminución en el precio se puede ver mermada por un costo de crédito elevado”, agregó el director Corporativo y de Negocios del BIM .
Por otro lado, Gregorio Sánchez estima que el BIM firmará para el 2023 crédito por un monto de 12,000 mil millones de pesos, lo que representaría un incremento del 13 por ciento respecto al cierre proyectado para 2022 que fue de 10 mil 460 millones de pesos. Además, aseguró que para este año se espera una mayor oferta de viviendas verticales, con balcones, terrazas, espacios pet friendly. De igual manera, se espera que hay una mayor automatización e inteligencia en los hogares y exista un mayor uso de las ecotecnologías.
“Al ser el único Banco especializado que atiende específicamente la construcción de vivienda y por nuestro tamaño, consideramos que nos encontramos con el crecimiento adecuado dentro del sector”, puntualizó Sánchez.
Entre los datos que destaca el Banco Inmobiliario Mexicano durante 2022 se encuentran: Se registró una utilidad mayor al 47 por ciento y el ROE promedio fue de 11.85 por ciento. Además, el Banco realizó una segunda emisión de Obligaciones Subordinadas llegando a 300 millones de pesos. Se posicionó como la institución bancaria más completa en temas relacionados con fideicomisos con un total de 2 mil 263 nuevos fideicomisos. Su cartera comercial creció 18 por ciento. Respecto a banca patrimonial, la institución financiera logró una captación con una variación anual del 20 por ciento con un total de 6 mil 617 millones de pesos; y durante el año BIM lanzó su aplicación móvil y su cuenta digital. Además, en sus proyectos para 2023 se encuentra el lanzamiento de la hipoteca digital y cadenas productivas.
Fuente Comunicae