El exdirector general de Petróleos Mexicanos (PEMEX), Octavio Romero Oropeza, sostuvo que la empresa se encuentra desarrollando el campo Bakté, uno de los más importantes, ubicado en Tabasco, y en lo que va del sexenio es el campo en el que han avanzado más rápido, gracias a la estrategia de producción temprana.
“Nunca habíamos tenido un desarrollo tan rápido, nunca en tan poco tiempo desde la primera gota de aceite obtenida se había entrado en perforación seis pozos, y es muy probable que de aquí a diciembre estemos con cinco o seis pozos de producción”, aseguró Romero Oropeza.
Con una reserva de 173 millones de petróleo crudo equivalente, el campo Bakté es uno de los descubrimientos más importantes del sexenio.
“La primera gota de aceite fue en abril de este año, y en nueve meses estaríamos con una producción muy importante a partir de que este año se hizo el descubrimiento, antes tardábamos años en desarrollar un campo, ahora se hace en tiempo muy corto y eso es un valor agregado para PEMEX”, aseguró Romero Oropeza.
Actualmente en este campo ya hay un pozo en producción, cinco en perforación con una profundidad promedio de 6 mil 200 metros y están estimando tiempos de 100 a 120 días para su terminación, además hay cuatro pozos adicionales en un programa de transición.
Bakté es un activo crucial para la producción de gas en México. La expectativa apunta a una producción de 53.27 mil barriles diarios de condensado y 662.15 millones de pies cúbicos diarios de gas.
Este campo fue descubierto en abril y en menos de cinco meses se ha generado la infraestructura, y según lo reportado por los ingenieros responsables, la meta es que en el 2024 se perforen hasta seis pozos, y como resultado de la producción temprana dejarán las condiciones para que en 2025 se desarrolle la totalidad del campo, con la incorporación de 15 pozos productores.
Cabe mencionar que la petrolera mexicana aumentó su inversión en el desarrollo de este campo a mil millones de dólares, lo que supera en 188% el monto original previsto.
La estrategia de producción temprana hizo que durante los últimos seis años PEMEX desarrollara 54 campos nuevos que aportan más de 560 mil barriles diarios, equivalentes a más de la tercera parte de la producción total actual, lo cual ha implicado una importante reducción en el tiempo que transcurre entre el descubrimiento y el desarrollo de un campo, pasando en promedio de 60 a 12 meses, es decir, a la quinta parte del tiempo.