Por Eduardo Reynoso, socio director de JedAIs, empresa de capacitación y certificación de IA.
A medida que el conjunto de herramientas tecnológicas al alcance de las empresas continúa su crecimiento exponencial, también lo hace la demanda del papel de la tecnología en los negocios.
Las transformaciones tecnológicas no son eventos singulares, sino una realidad constante de la vida corporativa. Según la última Encuesta Global de McKinsey a líderes empresariales y tecnológicos, la mayoría de las empresas invierte en tecnología al considerar el crecimiento futuro, y ven resultados positivos del trabajo de transformación que ya realizan.
Al mismo tiempo, los resultados sugieren que todavía hay una brecha significativa entre las mejores transformaciones tecnológicas y el resto. Observamos de cerca las respuestas de las organizaciones financieramente exitosas, a las que nos referimos como “de alto rendimiento”. Según los encuestados, estas empresas están más avanzadas que otras en la optimización de sus organizaciones tecnológicas de las siguientes maneras:
- Modernizar la arquitectura y las plataformas.
- Construir un grupo de talentos tecnológicos preparados para el futuro.
- Eliminar los silos del modelo operativo.
- Demostrar un claro valor comercial de las inversiones en tecnología.
- Modernizar la arquitectura y las plataformas.
Para superar la entrega a menudo lenta de soluciones de TI que se derivan de la arquitectura y las plataformas heredadas, las empresas con mejor desempeño invierten más que otras en tecnología de vanguardia, incluida la nube.
La oportunidad de la nube para las empresas es enorme, aunque todavía está en gran medida sin explotar, y que la entrega en la nube se correlaciona fuertemente con altos márgenes de beneficio. Las empresas con mejor desempeño también lo saben: tres cuartas partes de ellas dicen que sus empresas adoptan la nube. Es decir, una transformación completa o a gran escala en la que todas las cargas de trabajo elegibles se migran y/o refactorizan.
La nube es la tecnología avanzada más común que utilizan las empresas, aunque las que presentan mejor desempeño también son más propensas que sus pares a informar sobre la adopción de una variedad de otras tecnologías, incluidas la IA y la IA generativa, el Internet de las cosas y la computación periférica durante la implementación de sus iniciativas tecnológicas.
Las empresas tienden a adoptar un enfoque multinube, independientemente de su rendimiento financiero, y la inversión general parece estar dando sus frutos.
Solo el 8% no obtienen ningún valor comercial de sus migraciones a la nube. El aumento de la velocidad y la agilidad encabeza la lista, seguido por el crecimiento en el negocio, incluidas las nuevas capacidades, que los de mayor rendimiento tienen casi el doble de probabilidades que otros de citar.
El desarrollo de un grupo de talentos preparado para el futuro, con las habilidades adecuadas para respaldar la estrategia tecnológica general, es un desafío formidable para muchas empresas. Las empresas con mejor desempeño están abordando este problema de frente e invirtieren significativamente más que otras en su gente para garantizar que sus estrategias tecnológicas y culturas organizacionales estén sincronizadas.
Las empresas más exitosas tienen un mayor número de estrategias de talento que los demás. La mayoría de las veces se centran en la formación y el desarrollo a gran escala.
Es más, los que poseen mejores resultados son más propensos que otros a decir que sus empresas transformaron su talento, asociaciones y capacidades en los últimos dos años, y seguirán transformando su gestión del talento en los próximos años.