Haciendo una recapitulación del 2022, una tendencia de mercado que se mantuvo muy presente fue la “humanización” de las mascotas. ¿A qué se refiere este término? se refiere especialmente a la percepción de perros y gatos como parte de la familia y, por tanto, se les atribuyen gestos, actitudes o preferencias que solo son acordes con las personas.
Los países occidentales son los que tienen las tasas de “humanización” de mascotas más altas, al percibirlos como miembros queridos de la familia, donde el continente americano, liderado por Estados Unidos y seguido por Latinoamérica, son las regiones que presentan la mayor consideración, según la encuesta Voz del Consumidor en Estilo de Vida del 2022, realizada por la consultora Euromonitor.
Mientras más mascotas, más consideraciones
Si bien los motores del mercado son el mayor número de mascotas y el aumento del gasto en ellas, nuevamente esta es una inclinación específica de ciertas regiones:
Según un estudio realizado por GfK , el 56% de la población mundial tiene al menos una mascota en casa. Siendo Latinoamérica la región líder, donde el 80% de los encuestados mexicanos y argentinos tienen una mascota, así como 75% de los que contestaron desde Brasil. Los países que les siguen en la lista son; Rusia, donde 73% de la población tiene mascota, y EE. UU. con un 70%.
En tanto, el continente asiático, es donde la gente tiene menos mascotas. En Japón el 37% dijo tener alguna mascota en casa, en Hong Kong el 35% y en Corea del Sur apenas el 31%.
A mayor número de mascotas en casa y una mayor consideración a sus necesidades, se impulsan los hábitos de compra nuevos en el cuidado de las mascotas. De aquí que la “humanización”, sea una de las megatendencias que hoy rigen el mercado mundial de las mascotas. Entre los productos y servicios más recurridos se encuentran: los cuidados estéticos, médicos, servicios fúnebres, así como ropa, calzado, juguetes, pero también los consumidores realizan una mayor inversión en comida premium y saludable que logrará un mejor desarrollo de sus mascotas.
Un ejemplo de ello es Royal Canin, empresa que se ha dedicado desde su fundación hace más de 50 años, a investigar desde la ciencia las necesidades únicas de perros y gatos domésticos. Actualmente cuenta con más de 100 fórmulas nutricionales adaptadas a la raza, talla, estilo de vida, y hasta diferentes padecimientos médicos, posicionándose como una de las marcas con más dietas de prescripción para perros y gatos. Este enfoque de desarrollo de productos nutricionales se basa en investigaciones realizadas permanentemente por nutricionistas, veterinarios y científicos de todo el mundo. Estos alimentos de calidad superior están a disposición de las familias mexicanas.
Al alimentar a las mascotas considerando sus propias necesidades nutricionales y con alimentos concebidos específicamente para su biología animal, contrario a “humanizarlos”, se está garantizando parte de las cinco libertades a los que tienen derecho los animales de compañía, según lo estableció la Organización Mundial de Sanidad Animal: 1) Libertad de hambre y sed, 2)Libertad de incomodidad, 3) Libertad de dolor y sufrimiento, 4) Libertad de enfermedad, 5) libertad de expresar su comportamiento natural.
El lado B de la “humanización”: la convivencia responsable con las mascotas
En el mejor de los casos, ya sea mediante la adopción o la compra de un perro o gato, tomamos la decisión consciente de elegir a un individuo y llevarlo a casa para empezar a desarrollar con él una relación de beneficio común a nivel afectivo, físico, psicológico y social.
Al llevarlo a casa, nos encargamos de reemplazar a su grupo social e integrarlo a nuestro núcleo. Por tanto, la adopción o adquisición de un animal debe partir de un ejercicio de autonomía y conciencia personal de que deberemos proveerle a esa mascota de una convivencia con nosotros que sea responsable, de beneficio recíproco y no en un solo sentido (el nuestro), en la que no alteremos los comportamientos, naturalidad y necesidades de su especie.
Si bien la humanización de las mascotas está directamente conectada con la intención de sobreprotegerlos, es necesario retomar aspectos esenciales de la relación humano-animal: la importancia de la sana socialización con los de su especie, su correcta alimentación y su lugar dentro de la manada familiar, de tal forma que no tengan trastornos de conducta posteriores.
En estas fechas navideñas, esperamos que las personas sean conscientes de que al elegir una mascota, se debe optar por la convivencia responsable para con ella y a largo plazo.