El señor gobernador y su señora presidenta en la monarquía poblana
La dupla siniestra formada por el gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, y la presidenta de Morena en Puebla, Olga Lucía Romero Garci-Crespo o Mónica Caballero Garci-Crespo, hacen de Puebla su pequeño reino en el que sólo su voluntad y caprichos son válidos.
Son las arbitrarias imposiciones del gobernador, con complejo de Rey, las que le han provocado el rechazo al interior de su partido. No sólo es por imponer a sus familiares en puestos estratégicos dentro de su gobierno como al Secretario de gobernación; o por los favoritismos con ciertos funcionarios como la Garci- Crespo; el morenista, además no goza de buenas relaciones con el gobierno federal, y sigue sembrando la discordia al interior de su partido y se ha mostrado abiertamente distante a las políticas del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La cercana relación que el Rey Luis Miguel mantiene con su protegida la Garci-Crespo, también le ha ganado enemigos al interior del partido. De una forma descarada ha mostrado su protección y su tráfico de influencias en favor de su paisana. Bajo su auspicio, la política tiene ínfulas de reina y parece que no hay quien la pare.
Casi tan cuestionado como Carlos de Inglaterra por no dar el ancho para ser Rey; a Barbosa también le queda grande la gobernatura. Ya sólo falta dilucidar si la Garci-Crespo es tan cercana al gober como Camila a Carlos.