
Las operaciones humanitarias en Myanmar se están viendo obstaculizadas por el deterioro de las carreteras y las infraestructuras, según informó el sábado la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).
El terremoto de magnitud 7,7 del viernes dañó gravemente las infraestructuras críticas, incluidos los principales puentes y carreteras, dificultando el acceso de las operaciones humanitarias a las zonas necesitadas, dijo la OCHA.
Los daños en la autopista Rangún-Naipyidó-Mandalay provocaron interrupciones en el servicio, con grietas y distorsiones en la superficie que obligaron a los autobuses de la autopista a detener sus operaciones”, dijo la agencia de la ONU en un comunicado.
El terremoto de magnitud 7,7 del viernes dañó gravemente las infraestructuras críticas, incluidos los principales puentes y carreteras. Foto: AFP
El terremoto de magnitud del viernes dañó gravemente las infraestructuras. Foto: AFP
Los hospitales del centro y noroeste de Myanmar están luchando para hacer frente a la afluencia de heridos por el terremoto, declaró la agencia. Está previsto que el 30 de marzo lleguen 17 camiones de suministros médicos y de refugio para paliar la actual escasez de medicamentos, como bolsas de sangre y anestésicos.
Los gobernantes militares de Myanmar permitieron el sábado la llegada de cientos de socorristas extranjeros tras el terremoto que causó la muerte de más de 1.600 personas, la catástrofe natural más letal que asuela este empobrecido país devastado por la guerra en años.
El sismo del viernes, uno de los mayores que han sacudido esta nación del sudeste asiático en el último siglo, paralizó aeropuertos, puentes y carreteras en medio de una guerra civil que ha destrozado la economía y desplazado a millones de personas.