Osiel Cárdenas Guillén, exlíder del Cártel del Golfo, salió hoy 30 de agosto de 2024 de la prisión en la que estaba recluido en Estados Unidos tras ser capturado en México y ser extraditado a ese país, en el que llegó a un acuerdo tras declararse culpable en 2009 de cinco cargos en su contra por narcotráfico.
Cárdenas Guillén, de 57 años, estaba preso en el Centro Penitenciario de Alta Seguridad de Terre Haute, en Indiana, donde cumplió su sentencia reducida al declararse culpable de tráfico de cocaína y mariguana, lavado de dinero y de amenazar a dos agentes federales estadunidenses.
Con la declaración de culpabilidad, el exlíder del Cártel del Golfo fue sentenciado a 25 años de prisión en 2010 por la jueza federal Hilda G. Tagle. En su ficha en el Buró de Prisiones de Estados Unidos estaba marcado que el exnarcotraficante sería puesto en libertad este día tras cumplir su condena, para la cual se le tomó en cuenta el tiempo que estuvo detenido en México tras haber sido arrestado en Tamaulipas en 2003 por fuerzas federales y el buen comportamiento que mostró en prisión.
“Me disculpo con mi país, México, con Estados Unidos, mi familia, mi esposa, especialmente, mis hijos, por los errores que he cometido. Creo que el tiempo que he pasado en prisión he reflexionado y me he dado cuenta del mal comportamiento que he tenido y de verdad estoy arrepentido. También me disculpo con todas las personas que herí directa e indirectamente”, dijo el también impulsor de Los Zetas en la audiencia en la que conoció su sentencia.
Tras su liberación, Osiel Cárdenas Guillén podría ser deportado a México, donde está acusado de crimen organizado y tráfico de drogas, o autoridades estadunidense le permitirían permanecer en Estados Unidos bajo el esquema de libertad supervisada o existe la posibilidad de que se acoja al programa de testigos protegidos.
Conceden amparo a Osiel Cárdenas Guillén en México
Osiel Cárdenas Guillén buscó asegurar su libertad una vez que saliera de prisión en Estados Unidos y dejara de estar en custodia del Buró de Prisiones en ese país, por lo que tramitó un amparo para que se cerrara un proceso penal en su contra en México por posesión de armas.
En febrero de este año el magistrado instructor del Primer Tribunal Colegiado de Apelación del Segundo Circuito, Jorge Mario Montellano Iturralde, le dio la razón a la defensa del exlíder del Cártel del Golfo, la cual alegó que los delitos contra el exnarcotraficante ya prescribieron tras su detención y extradición a Estados Unidos en 2007, pero instruyó que otro tribunal analice de nuevo el caso y se vuelva a pronunciar.