De acuerdo al estudio “Perspectivas del agua en México: propuestas hacia la seguridad hídrica”, presentado por el Consejo Consultivo del Agua en Jalisco y realizado por la UNAM y Agua Capital, la contaminación y sobreexplotación de los cuerpos de agua, principales problemas en Jalisco, son debido a la densidad de población.
El documento de análisis “Perspectivas del agua en México: propuestas hacia la seguridad hídrica”, fue presentado hoy por el Consejo Consultivo del Agua de Jalisco que preside Francisco Mayorga Castañeda y por el Consejo Consultivo del Agua, encabezado por Raúl Rodríguez Márquez.
Dicha presentación estuvo a cargo del doctor Fernando J. González Villarreal, Coordinador Técnico de la Red Agua de la UNAM y Director del Centro Regional de Seguridad Hídrica, bajo los auspicios de la UNESCO, y contó con la colaboración de Eduardo Vázquez Herrera, Director Ejecutivo de Agua Capital, Fondo de Agua de la Ciudad de México, y Jorge Alberto Arriaga Medina, Coordinador Ejecutivo de la Red del Agua UNAM.
De acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), en México, 76% del agua concesionada se destina a usos agrícolas –agrícola, pecuario y acuacultura–; 15% al uso público urbano-doméstico y otros usos conectados a las redes de agua potable; 5% al uso no doméstico autoabastecido –industria, comercio y servicios–; y 4% a la generación de electricidad, excluida la hidroelectricidad.
Además, 60% de los cuerpos de agua presentan algún grado de contaminación y sólo 50% del volumen recolectado en alcantarillado recibe tratamiento, esto sumado a que 71% del territorio nacional presenta grados altos de presión hídrica, al tiempo que en México hay 106 municipios con alta vulnerabilidad a sequías.
En el estado de Jalisco, la contaminación y la sobreexplotación de los cuerpos de agua son los principales problemas y tienen que ver con la densidad de la población. De acuerdo con el análisis: Principales Resultados del Censo 2020 Jalisco, la entidad es la tercera urbe más poblada, con 8´348,151 habitantes a marzo de 2020, lo que significó un incremento de la población de 13.6% entre 2010 y 2020; y del 90.9% en las últimas 4 décadas.
Dentro de los proyectos para combatir el desabasto de agua en los siguientes años en el estado de Jalisco, debido al crecimiento poblacional, se encuentran los relacionados con aumentar la disponibilidad mediante el desarrollo de infraestructura de almacenamiento y la búsqueda de nuevas fuentes. En lo que se refiere a la infraestructura hidroagrícola, son necesarios sistemas y redes para la operación efectiva y eficiente de las presas El Carrizo y Vista Hermosa, y el reuso de aguas tratadas de las PTAR´s de la zona del Lago de Chapala en los cultivos de barrios.
En ese tenor, el documento indica que es indispensable incrementar la cartera de proyectos y ritmo de construcción de infraestructura hídrica, impulsar la eficiencia de los sistemas de agua potable (proyectos de sectorización, reparación de fugas y adopción de tecnologías); así como optimizar los procesos agrícolas e industriales para la explotación del recurso.
El análisis concluye que garantizar el acceso al agua segura para todos los mexicanos es un derecho fundamental. El manejo y la conservación de los recursos hídricos del país se han convertido en un factor determinante del desarrollo sostenible y no puede postergarse.
Fuente Comunicae