*El evento se llevará a cabo este sábado 22 de noviembre en el Exbalneario Olímpico de Pantitlán a partir de las ocho de la noche
*Los boletos ya se encuentran disponibles a través de Ticketpoint, plataforma oficial del evento
Valentino, uno de los nombres más poderosos y venerados en la historia del high energy mexicano, regresa a los grandes escenarios para protagonizar un acontecimiento que promete quedar inscrito en la memoria colectiva de miles de bailarines. Este sábado 22 de noviembre, el Exbalneario Olímpico de Pantitlán será testigo del reencuentro entre el mítico concepto de discoteca móvil encabezado por Alejandro Mendoza —el legendario DJ Alex— y su fiel audiencia, en una celebración que también enmarca los 45 años de potencia sonora del emblemático sonido Montesquieu, otra institución fundamental en la historia de la música disco en México. Cuenta además, con la presencia estelar de Tay, quien fuera vocalista de Topazz y Entourage que regresa a México para interpretar sus éxitos. Los boletos ya se encuentran disponibles a través de Ticketpoint, plataforma oficial del evento.
Desde mediados de los años ochenta, Valentino se ganó un lugar privilegiado dentro del imaginario musical urbano por su audacia tecnológica, su capacidad para anticipar tendencias y, sobre todo, por ser uno de los pioneros en transformar la música disco y el high energy en una experiencia masiva. Cuando DJ Alex Mendoza comenzó a trabajar con tornamesas, iluminación y audio que llegaban directamente de Estados Unidos y Europa, no solo ofrecía una selección musical innovadora: estaba moldeando, sin saberlo, el ADN de las fiestas que definirían a toda una generación. En aquel pulso nocturno convivía con otras potencias como Polymarchs y Patrick Miller, formando una triada que expandió los límites de lo que una discoteca móvil podía significar para los barrios, los centros comunitarios y los foros improvisados alrededor de la Ciudad de México y el país.
La historia de Valentino está construida sobre giras interminables que llevaron su concepto a casi todos los rincones de la República, alternando con figuras internacionales, empujando la sofisticación técnica de cada montaje e imponiendo un estilo sonoro y visual que sería replicado por cientos de equipos emergentes a lo largo de los ochenta y los noventa. Muchas de las melodías que hoy son himnos del high energy mexicano —y que jamás sonaron en radio abierta— encontraron en Valentino un canal de difusión que las convirtió en clásicos de culto, reproducidos una y otra vez en fiestas, explanadas, ferias y barrios enteros que no necesitaban promoción mediática: bastaba con escuchar el rugido de las bocinas para saber que Valentino había llegado.
Con la llegada de los noventa, Alex Mendoza incursionó en la vida nocturna como empresario, abriendo centros nocturnos que redefinieron el entretenimiento en el entonces Distrito Federal. Sin embargo, el llamado del high energy —ese latido que nunca se apaga en quienes vivieron de primera mano su esplendor— ha sido demasiado fuerte para ignorarlo. Por ello, ha decidido regresar por una sola noche a la fiesta monumental que él mismo ayudó a construir, para demostrar que Valentino sigue vivo, vigente y con la misma capacidad de convocar a multitudes.
El regreso será aún más especial debido a la participación de Montesquieu, uno de los sonidos más influyentes y respetados del país, dirigido por Juan Andrade y Héctor Montesquieu. Surgido a finales de los años setenta, Montesquieu se consolidó como referente en la zona oriente del Valle de México gracias a su imponente infraestructura, su característico estilo de mezcla y su visión para integrar éxitos que marcaron la transición del disco setentero al high energy ochentero. Aunque el género enfrentó una baja en los noventa, Montesquieu jamás abandonó sus tornamesas: siguió presente en bodas, XV años, fiestas privadas y encuentros comunitarios donde el público se negaba a dejar morir la música que hacía vibrar sus memorias. “El high energy nunca se ha ido —suele repetir Juan Andrade—, solo espera el momento en que el corazón vuelve a pedirlo”. Este 45 aniversario confirma que la fidelidad del público ha mantenido vivo un legado que sigue creciendo.
El cartel suma además un ingrediente que elevará aún más la emoción de la noche: la participación especial de la vocalista que formó parte de Entourage y también de Topazz, una de las voces más queridas y representativas del high energy europeo, cuyo rango vocal y energía en el escenario han marcado época entre los seguidores del género. Su presencia no solo es un homenaje a la era dorada del baile interminable, sino una oportunidad para escuchar en vivo esos temas que acompañaron generaciones enteras en las pistas de México.
Valentino, Montesquieu y la magia de Tay, la voz que acompañó a Entourage y Topazz conforman un evento que está destinado a romper cualquier barrera generacional. No se trata solo de música: es una ceremonia de identidad, memoria y celebración colectiva. Miles de personas se reunirán para revivir una época que nunca se fue del todo, porque sigue latiendo en cada transición, cada beat y cada reflector que se enciende al ritmo del high energy.
El próximo sábado 22 de noviembre, el Exbalneario Olímpico de Pantitlán se convertirá en un templo sonoro donde los años ochenta volverán a brillar como si el tiempo jamás hubiera pasado. Valentino está de regreso. Montesquieu celebra su historia. Tay regresa a México. Y el público está listo para bailar. Boletos disponibles en Ticketpoint.
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